Todas las familias tienen en su historial una oveja descarriada, un miembro rebelde, un explorador; alguien que busca salirse del esquema y el condicionamiento heredado pues no se adaptan al sistema. Pero esas “ovejas negras” son en realidad buscadores natos de caminos de liberación para el árbol genealógico.
¿Qué es un buscador?
Un buscador, es un miembro del sistema familiar que no se adapta a las normas o tradiciones, que está buscando revolucionar las creencias yendo en contravía de los caminos marcados por su árbol genealógico; que a su vez es criticado, juzgado e incluso rechazado. Aquellos que están llamados a liberar al sistema de historias repetitivas que han frustrado a generaciones.
Los buscadores son las ovejas negras, los que se rebelan y su papel es fundamental: reparar, desintoxicar y crear una nueva ruta para las nuevas generaciones. Gracias a ellos el árbol genealógico renueva sus raíces.
Deseos reprimidos, sueños no realizados, talentos frustrados de nuestros ancestros se manifiestan en su rebeldía buscando realizarse. La familia, por respuesta, querrá seguir manteniendo el curso castrador y tóxico del tronco, lo cual hace de la tarea de las ovejas negras algo difícil y conflictiva.
¿Cómo es una oveja negra?
Una oveja negra se distinguirá generalmente por el conflicto que enfrente en la familia, al querer romper con los esquemas preestablecidos así que la podremos distinguir por:
- Tener actitudes, creencias, pensamientos y comportamientos diferentes a lo que la familia espera de ella.
- Establece límites claros y saludables a la familia.
- Es firme respecto a los valores que rigen su vida, indiferentemente de lo que piensen sus padres, o familiares.
- Expone tus puntos de vista sin miedo, sin intentar manipular a nadie en su sistema.
- No es invitada a las reuniones familiares o cuando llega el resto se calla en su presencia o lo evitan.
- La familia siempre dice que es especial o raro o “diferente”. Pero esa “rareza” suele provocar preocupación.
- Salir de lo convencional puede causar alteraciones en el orden de los hermanos y por ello algunos conflictos y rivalidad.
- La familia les pone apodos molestos o etiquetas.
¿Qué pasa cuando se es el buscador de la familia?
Aunque los buscadores buscan un camino de libertad y romper con el destino errático del sistema familiar, suelen padecer su rol en el árbol genealógico.
- Su autoestima se ve lastimada al sentirse “rechazados” por la familia, la cual no los respalda o apoya.
- Falta de arraigo. Todos necesitamos pertenecer a un grupo que nos cobije, una red de apoyo y que nutra nuestras raíces. Pero cuando ello no sucede se da una falta de pertenencia, un desarraigo por exclusión.
- Una baja autoestima y desarraigo muy seguramente afectarán la forma en que el buscador se relacione con los demás. Esta condición les hace sentirse insuficientes para recibir amor, por lo que sabotean sus relaciones, con la finalidad de confirmar con los demás la visión que tienen de sí mismos: no merezco amor.
La oveja negra en las constelaciones familiares
Bert Hellinger, padre de las constelaciones familiares señala que las ovejas negras, que son criticados y juzgados, son quienes liberarán al árbol genealógico de las historias repetitivas. Por ello son importantes para la familia, y es relevante que esa “rareza” se conserve, pues “es el sueño realizado de todos los ancestros”.
CONSTELACIONES FAMILIARES MONTREAL