La motivación es esa fuerza que te mueve a lograr tus metas, que te lleva a levantarte de la cama y conquistar tu vida diaria sin claudicar. La motivación es el sentido de lo que hacemos, un sentimiento vital que nos brinda energía para continuar por muy difícil que parezca el camino.

Todos tenemos un motivo que nos lleva a hacer determinadas cosas, plantearnos metas y conducirnos a ellas con paso firme; lo que nos inspira para trabajar, luchar e incluso cambiar, según el caso.

¿De dónde nos llega la motivación?

Hay motivación externa, con frecuencia positiva, como cuando hacemos cosas llevados por los vínculos con nuestros seres queridos, amigos, etc.; son factores que no están en nosotros pero que influyen positivamente en nuestro comportamiento para lograr ciertos objetivos.

No obstante, también hay motivaciones externas que no son positivas y pueden comprometer nuestro estado de ánimo, como hacer las cosas sólo por una remuneración económica, por el qué dirán en nuestro grupo social, porque nos sentimos comprometidos aun cuando quisiéramos decir no, etc.

Y la mejor de todas es la motivación interna, aquella que nace en nosotros y es para nosotros, aquella que encuentra energía propia para llevarnos ágilmente hacia metas que nosotros mismos, nosotras mismas, hemos elegido sin que medie imposición o compromiso con otros.

La motivación interna es un signo de auconocimiento y, particularmente, de autoaceptación. Hay un reconocimiento implícito de nosotros mismos hacia nuestras necesidades y deseos que hemos descubierto, que nos lleva a actuar de manera favorecedora hacia nosotros, que nos hace sentir movidos hacia el equilibrio y congruencia con eso que sentimos y eso que deseamos.

Descubrir aquello que nos mueve, que nos motiva, es una tarea que se desprende del trabajo interior, de la aceptación de nuestras emociones en control y, especialmente de la confianza que tenemos en nosotros mismos, nosotras mismas.

El escritor Bernardo Stamateas nos dice: “Si hoy no puedes ser feliz y los problemas te quitan las ganas de perseverar hasta ver el objetivo cumplido, es porque necesitas confiar plenamente en tus capacidades y en tu potencial”.

 Confianza es convicción y certeza de que todo aquello que uno se proponga lo va a alcanzar: Bernardo Stamateas.

Cuando se está motivado, se confía en uno mismo y camina en paz hacia la siguiente meta, mas se hace de forma consciente y desde el aquí y el ahora. Es decir, la motivación es una forma de vivir el presente de manera responsable y sólo dependiendo, preferentemente de nosotros mismos (cuando la motivación es interna).

¿Qué es lo que nos mantiene motivados?

La motivación es el deseo de lograr cosas y obtener, en el camino, una satisfacción personal. Cuando soñamos, y aterrizamos los sueños en metas y objetivos concretos, realistas y alcanzables, entonces nace la motivación.

A la medida que avanzamos hacia la concreción de esos sueños, la motivación se alimenta de las pequeñas conquistas y se mantiene hasta lograr la gran meta. Recibir pequeñas muestras de que vamos avanzando hacia nuestros grandes objetivos nos mantiene motivados.

Ser lo que somos y llegar a ser aquella persona que somos capaces de ser, es la verdadera meta de nuestra vida: BS.

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