Las mujeres con padre ausente tienden a tener una afectación particular, diversa a la de los varones que viven bajo la misma condición, pues la figura paterna —necesaria para cualquier niño— cumple funciones diferente en cada caso.
¿Qué es un padre ausente?
Ésta podría parecer una respuesta obvia; no obstante la ausencia del padre va más allá de una falta de la presencia física del hombre (pareja natural de la madre) que haya engendrado y/o criado a la niña. La ausencia del padre puede ser asimismo una percepción del padre como distante y emocionalmente inaccesible. Como en el caso del padre que deja la crianza de las niñas para la madre, mientras que ya él ser hará cargo de los niños.
El hecho de crecer junto a una figura paterna que a pesar de estar, es incapaz de aportar plenitud, cariño o reconocimiento, deja corrientes de vacío en el corazón de un niño que está aprendiendo a construir su mundo.
¿Por qué se ausenta un padre?
Podríamos decir que el hombre que deja a sus hijos, o que se ausenta de sus vidas, es sólo por irresponsable o indiferente, pero en realidad hay otros motivos por los que un padre abandona:
- Por inmadurez, pues sigue siendo un niño.
- Porque él también sufrió abandono de su padre.
- Siente rechazo al compromiso y a la responsabilidad.
- Teme a sentirse desplazado por el niño.
- Por apego a su propia madre.
- Desea mantener su juventud y libertad.
En todos estos casos podría parecer simplemente egoísmo, y tal vez sea en parte el motivo de su ausencia, pero no lo es en todos los casos; los hombres también padecen sus propios conflictos y miedos, aunque la sociedad convencional le ha enseñado a evadir sus emociones antes de manifestarlas porque eso sería un signo de debilidad.
Si a esto le sumamos que muchos hombres tienen enormes dificultades para conectar con sus emociones, nos encontramos con padres que presentan carencias a la hora de atender emocional y afectivamente a sus hijos, en general y especialmente a las niñas.
También habría que tomar en cuenta que la ausencia del padre en ocasiones es motivada por la propia madre porque, durante una separación, “castiga” al padre evitándole ver a los hijos con regularidad o definitivamente nunca.
CONSECUENCIAS DEL PADRE AUSENTE
La presencia del padre en la vida de una niña está vinculada al autoconcepto de ésta y el desarrollo de una autoestima positiva; aunque no sea definitorio, el padre será el modelo masculino que sustentará la relación de la futura mujer con el resto de los hombres.
El padre genera fuerza, seguridad, confianza, manejo de límites y poder personal.
En el caso de un padre ausente de manera física la niña recibe una mensaje de “te abandono” porque no vale la pena quedarme a tu lado, no eres suficiente… para estar a tu lado. De tal manera, es probable que tenga relaciones dependientes donde el amor de su pareja nunca sea suficiente, porque no creen realmente en ese amor (ya que no se siente merecedoras de éste).
Este tipo de padre ausente genera hijas necesitadas de una pareja, pero que a la vez tienen miedo al abandono, así que se apegarán a su pareja de manera obsesiva y asfixiante, de manera que tarde o temprano la pareja sí se irá. Del mismo modo buscarán personas poco comprometidas y de antemano saben que las abandonarán. En estos casos se deberá trabajar con el desapego.
La figura de un padre ausente genera en la etapa adulta un desapego afectivo que nos hace ser más inseguros a la hora de establecer determinadas relaciones.
En el caso de un padre emocionalmente ausente, en etapas tempranas de la vida de la niña, puede hacer que en el futuro las mujeres en las que se conviertan tengan vidas emocionalmente desastrosas, particularmente en su relación de pareja. Un padre egocéntrico tiende a ser incapaz de advertir las necesidades afectivas del otro y, por tanto a ignorarlas; no se hace consciente de la necesidad emocional de su familia.
En consecuencia, ante la aparente indiferencia emotiva del padre, la niña sentirá que no es amada o aceptada como lo necesita, generándose así una personalidad a la que le será difícil proveerse la felicidad, amarse a sí misma; te llevará a dudar de que otros le amen. Tarde o temprano elegirá una pareja que, por motivos diversos, no sepa amar. En este caso vemos que la autoestima estará mermada desde la infancia.
Aunque esta ausencia no es del todo negativo: en algunos casos, las mujeres que crecen sin una figura paterna maduran más rápido, y están más acostumbradas a luchar por sus metas sin buscar la aprobación de otros.
CÓMO AFRONTAR LA FIGURA DEL PADRE AUSENTE
Si ahora eres ya una mujer pero sigues siendo una niña con padre ausente deberás hacer frente a esta situación, sobre todo para que tú puedas vivir de manera plena con una mejor autoestima y una vida de pareja más satisfactoria.
En estos casos, por ejemplo, deberás asumir que tu padre no estuvo presente en tu vida por motivos que le corresponden a él, ya sea por irresponsabilidad o por incapacidad física o emocional; es decir que los motivos no tuvieron que ver contigo y tus virtudes.
- Asume que tu padre vive en ti, y tú tienes 50% esencia de tu padre.
- Acepta que lo extrañas y te duele su ausencia
- Puedes realizar una ceremonia de despedida donde le des las gracias por tu vida
- Escribe tus pensamientos sobre él hasta que salga lo positivo
- Permite que el amor que sientes por él fluya
- Libérate de toda compulsión que te lleve a sustituir su amor