Mi pareja me pidió tiempo, ¿qué hago? Una pregunta frecuente en consulta cuando se trata de la terapia de pareja.
La encontré llorando en la sala de espera, había pedido cita para una sesión de emergencia.
—¿Qué te pasa? —le pregunté alarmado.
—Mi pareja me pidió tiempo, ¿qué hago? —ella respondió aún con lágrimas en los ojos.
Esta es una experiencia frecuente en la vida de pareja. Uno de los miembros requiere tiempo y la otra persona no sabe cómo actuar ante ello o qué es lo que “tiempo” significa o cómo repercutirá en la relación.
A veces el tiempo es temporal y la pareja vuelve a estar junta de inmediato. En otras ocasiones “tiempo” es una especie de preámbulo de la separación. Por ello cuando alguien pide un lapso para estar solo o para pensar, suele ser tan desconcertante y provocar angustia o temor en el otro.
¿Por qué pide tiempo tu pareja?
Cada cabeza es un mundo; no hay una respuesta exclusiva a por qué alguien requiere un tiempo para estar consigo mismo y distante de su pareja. Algunas opciones frecuentes pueden ser:
- Tu pareja se siente agobiada. Ya sea por presión laboral, social o incluso la que puede causarle el compromiso de pareja, una persona puede llegar a sentirse tan agobiada que requiere ese tiempo para volver a encontrar a sí misma y serenarse.
- Hay que dar un paso atrás. Algunas personas se asuntas por el arrebato que puede causarles sentirse enamoradas con tanto furor, o bien la historia ha ido tan deprisa que les envuelve. Puede que sientan haber perdido parte de su privacidad e incluso de su personalidad al estar en pareja. El tiempo que pide la pareja en este caso es para tomarse las cosas con más calma, mirar de una forma panorámica y más objetiva e ir con más tiento.
- No sé lo que quiero. A veces un miembro de la pareja puede comenzar a tener dudas sobre la relación. Pierde la perspectiva sobre si se trata de amor, amistad, costumbre, etc. Otro motivo puede ser miedo al compromiso, aunque aún siga amando a su pareja.
Posiblemente haya alguna crisis como la que se sucede con la edad, cambios drásticos, algún duelo. Todo ello puede alterar la perspectiva de una persona, que le exija replantearse su vida y hasta la relación. Quizá estando acompañado, no encontrará respuestas, por eso necesita poner distancia de por medio para clarificar su condición.
- Se terminó el amor. Ciertamente hay “tiempos” que son preludio del final porque se terminó el amor, tu pareja ya no quiere estar contigo y no sabe cómo decirlo o quizá conoció a alguien más. No es fácil afrontar esta razón, pero hay que tomarla en cuenta como un tema que hay que afrontar.
¿Qué hago si mi pareja pide tiempo?
Aunque no es fácil soltar y dejar a la persona que amamos, tampoco es adecuado retenerla de manera obligada o por alguna clase de compromiso que no tiene porqué cumplir. Si la pareja te pide tiempo, debemos darlo.
Aunque sé que esto no es fácil y genera mucha incertidumbre, especialmente si este tiempo significa que no volverá y terminará la relación. Por ello te dejo aquí algunas claves de lo que puedes hacer mientras pasa ese “tiempo” y te preparas para el futuro, sea cual sea.
- Respeta la decisión. Como estábamos viendo, si tu pareja te pide un tiempo, es que no quiere ahora mismo estar contigo como pareja. No se puede obligar a nadie a estar en una relación, por lo que la decisión se debe respetar.
- Comunicación. Ante la separación —temporal o definitiva— lo importante es que se abran los canales de comunicación. Ambos deben ser honestos respecto al momento en que se encuentran y cómo se sienten, así como lo que puede suceder luego de ese tiempo.
- Infórmate. Pregunta a tu pareja todas las dudas que tengas. Tienes derecho a que sea honesta contigo y a estar informada de cuál es el plan de quien requiere ese tiempo. Así podrás tomar una decisión con conciencia. No te contentes con respuestas generales y evasivas. Pídele que te explique sus motivos. Si tu pareja te respeta y valora como persona, encontrará justo explicarte sus razones.
- Los acuerdos. Si existe la posibilidad de que sea un distanciamiento temporal, deben acordar cómo llevarán ese tiempo. Aclaren si se van a comunicar de alguna manera o van a establecer contacto cero. ¿Están pensando este tiempo para conocer a otras personas o no? Establezcan normas que puedan seguir, que sean de mutuo acuerdo y comprométanse a cumplirlas ambos.
- ¿Cuánto es un tiempo? Es importante que quien requiere tiempo sea claro de cuánto tiempo piensa alejarse. Quien se “queda” no puede esperar eternamente a que el otro decida volver, por ello también esto debe quedar establecido. Lo ideal es pactar un tiempo prudencial, de forma que la situación no se eternice. Al cabo de ese tiempo, tu pareja debe tomar su decisión. Si después de ese tiempo no hay claridad, se deberá de definir nuevamente la situación de la pareja.
- No sean víctimas. Quien se “queda” puede estar tentado a sentirse víctima de su pareja que le ha pedido tiempo y a regodearse del sufrimiento. Peor no hay que asumir un rol pasivo, después de todo, tú has aceptado esa pausa y pactado con tu pareja. Hay que ser firmes y no perder la perspectiva. Además, considera que los motivos que llevan a tu pareja a pedir ese tiempo no tienen que ver contigo, “no eres tú”. No te victimices.
- Sigue tu vida. Por muy complicado que parezca seguir tu vida mientras tu pareja se toma su tiempo. Es lo mejor que se puede hacer. Vence la incertidumbre con la rutina, date tu propio tiempo y aprovéchalo también para reflexionar. Date tu espacio para hacer cosas que te gustan y que tal vez por estar en pareja no habías hecho, etc. Reencuentra tu individualidad.
¿Y si no regresa?
Tristemente existe la posibilidad de que la pareja no regrese. No está en tus manos ni tampoco deberás exigirle o rogarle porque regrese. Si tu pareja no vuelve después de darse un tiempo es porque ya no eres objeto de su amor o éste no puede ser concretado contigo.
Lo ideal es generar una conclusión, cerrar el ciclo de la relación y soltar, preferiblemente en los mejores términos. La terapia de pareja puede ayudar en este proceso si es irremediable.
Aquí >> puedes encontrar cómo pasar el duelo por un amor
JORGE DOMINGUEZ | PSICOTERAPIA DE PAREJA