Son varias las formas en cómo afecta el trastorno de ansiedad a la relación de pareja… Si afrontar el problema ya es complicado para quien lo padece, lo es aún más para la pareja que difícilmente puede comprender aquello que ha transformado tan abruptamente su cotidianidad y, con ello, su relación de pareja.
El trastorno de ansiedad generalizada (TAG) se caracteriza por una excesiva preocupación de que se sucedan catástrofes y situaciones fatídicas que dañe a quien la padece y, por supuesto, sus seres queridos.
La mente de quien sufre este trastorno se apresura a generar, con pesimismo, escenarios en lo que recrea sucesos trágicos; estas imágenes detonan en el cerebro de las personas una reacción de espanto que produce hormonas —como la adrenalina— que motivan desde inquietud o ansiedad hasta pánico.
La situación es abrupta, los pensamientos son intrusivos y espontáneos, la reacción inmediata e incontrolable para quien está en crisis ansiosa. Ello también tomará por sorpresa a la pareja; ésta sufrirá el impacto ya que sobre ella se centra la preocupación del momento, así como tendrá que enfrentar las posibles secuelas de la crisis de su pareja (temor, culpa, impotencia, miedo al miedo, etc.)
Asimismo, la pareja de quien sufre TAG tendrá la dificultad de comprender los episodios motivados, aparentemente, por una preocupación exagerada de su ser querido; podrá creer que miente o que intenta alguna clase de manipulación, o pretende llamar la atención.
La pareja sufre un shock inicial pues, igual a quien padece TAG, es incapaz de entender lo que está pasando; con el tiempo no comprende cómo su pareja ya no puede hacer cosas que antes sí podía, por muy simples que sean. Intentará ayudar usando el sentido común y el razonamiento, pero esta lógica para quien sufre ansiedad no funciona pues sobre ella predomina el miedo y la sensación de desamparo cuando se dan los síntomas.
EL QUE CALMA
Corresponderá a la pareja encargarse de “calmar” a quien sufre el cuadro de ansiedad, buscará evitarle preocupaciones innecesarias; estará al pendiente.
No obstante, al ser incapaz de ayudar, la pareja se sentirá frustrada. Ya que la lógica no funciona sentirá como si la persona que sufre ansiedad no estuviera haciendo lo suficiente para restablecerse y volver a la “normalidad” y vendrá la desesperación o el enojo.
En situaciones así suelen darse comentarios por parte de la pareja como: “no tiene voluntad para salir adelante”, “no quiere hacer nada por mejorar”. Por el contrario, quien sufre ansiedad vive bajo la sombra de la incomprensión.
Ante la sensación de fracaso de quien no puede ayudar a su pareja en la situación de TAG se presenta el abandono de los intentos por auxiliar a la pareja y luego una separación emocional que acentúa la problemática. Ambos miembros de la pareja se sienten aislados, incomprendidos, abandonados; vendrá con ello sentimientos de soledad, culpa y tristeza.
Igualmente, el problema habrá de interferir en la habilidad de realizar actividades cotidianas con la pareja, y su estilo de vida se verá alterado significativamente; otro aspecto al que debe enfrentarse la pareja que agravará la frustración, enojo y aislamiento.
EL CONTROLADOR
Por otra parte, quien sufre el trastorno de ansiedad generalizada buscará minimizar la incertidumbre para su pareja; por lo que se volverá más controlador, involucrando a todos a sus miedos y preocupaciones. Así “garantizará” que todos están experimentando su situación y podrán comprenderla mejor.
La cotidianidad se verá estructurada en función del TAG. Se sale menos, se determinan horarios, se establecen reglas para estar comunicados constantemente, se deja de ser espontáneo en la realización de actividades pues ahora todo debe planearse según necesidades específicas del paciente, quien requiere sentirse totalmente seguro en donde esté, así como minimizar el riesgo de sufrir una crisis.
De tal manera, la vida en pareja se convierte en predecible, angustiante y cargada de temores.
En tales casos es importante actuar y solicitar ayuda a un profesional de la salud mental.
SI TU PAREJA TIENE TAG, ASÍ PUEDES AYUDAR:
- Aprende acerca del trastorno.
- No critiques las conductas irracionales de tu pareja, ni sus miedos.
- Por el contrario, refuerza con motivación positiva conductas saludables.
- Mide el progreso de forma individual y no lo compares con otros casos.
- Acompaña en el proceso paso a paso.
- Pregunta y escucha cuidadosamente cómo ayudar a tu pareja.
- Aprende cuándo ser más paciente y cuándo motivar al cambio.
CÓMO SEGUIR LA VIDA SI ERES PAREJA DE ALGUIEN CON TAG
- No abandones tu propia vida e intereses.
- Mantén un sistema de soporte entre la familia y amigos.
- Busca un profesional para que asista a la pareja si es necesario.
- Pide ayuda sin demora.
JORGE DOMÍNGUEZ | PSICOTERAPIA