Si en esta cuarentena ya no te soporta ni a ti mismo, te recomiendo estas 7 claves de cómo ser tu mejor compañía y aligerar el confinamiento.

Cuando anunciaron que debíamos permanecer en nuestras casas y restringir nuestras salidas para evitar la rápida propagación del coronavirus Covid 19, Manuel lo consideró como una buena oportunidad para hacer aquello que siempre dijo que haría cuando tuviera tiempo.  

Sin embargo, en la primera semana de la cuarentena se sentía tan tenso, abrumado y ansioso por las noticias y el encierro que nunca se ha sentido inspirado para lo que se había propuesto. Por el contrario, está decaído, malhumorado y apático. 

A María Luisa le encantó la idea para poder escribir la novela que le rondaba la cabeza. A los pocos días comenzó a pelear con los hijos, se sentó a ver televisión por horas y a comer botanas que su marido inventa para “entretenerse”. Concentrase para escribir es imposible, apenas se queda en silencio sus propios pensamientos la hacen sentir angustiada.  

“Ya no me aguanto” 

A Martín el tiempo le empezó a parecer eterno, deambula de la sala a la cocina aburrido, comenzó a tener pleitos con Jorge y los niños le parecen más latosos y chillones que de costumbre.  

Sofía estaba emocionada porque al fin tendría tiempo de arreglar su departamento nuevo, al que se había cambiado al dejar por primera vez la casa de sus padres. Pero eso no ha pasado.  

Ella es una más de las personas que pasa la mañana durmiendo, la tarde dando vueltas por la cocina y en la tarde pone maratones de series para no llorar; aunque llega un momento que nada de esto la calma. El silencio la aterroriza.  

Muchos se quejan por el confinamiento, otros la pasan de manera terrible y buscan cualquier forma de evasión. Hay quienes dicen “estoy harto”, otros mencionan “ya no me soporto ni a mí”. Cuando las opciones se reducen y la rutina nos acorrala, como en esta cuarentena, estar con uno mismo no es nada fácil.  

Ciertamente el confinamiento en casa, la consciencia de lo prohibido, las limitantes que ello implica, pone en juego nuestro bienestar físico y emocional. Pero también para algunos de nosotros ha puesto de manifiesto lo mal que nos llevamos con nosotros mismos, es por ello que hoy te compartiré algunas claves para ser un mejor compañero para ti mismo. 

Cómo ser tu mejor compañía

“Si no puedes ir al exterior, ve a tu interior”

Aunque pudieses salir de casa, no hay lugar donde puedas estar en el que no vayas contigo. Es decir, tú y todo lo que eres están siempre presentes, no puedes evitarte. Así que ser un buen compañero y llevarte bien contigo es fundamental para lograr tu bienestar emocional.  

En este sentido, este período puede ser muy positivo para nosotros; con buena fortuna podremos convertirnos en nuestro mejor compañero y dejar de temer estar solos y en silencio.  

1. Trabaja el autoconocimiento y la autoestima (un tema que he tocado mucho en este blog). 

Si logramos conocernos, aceptarnos y amarnos, estaremos bien con nosotros mismos y cada día tendremos menos miedo a la soledad. Asegurémonos de ser una buena compañía para nosotros mismos.  La confianza y seguridad en uno mismo nos permitirá enfrentar los diferentes miedos que aparecen cuando se está en soledad. 

Para ello te pueden servir estos artículos: 

• ¿Qué es el autoconcepto y cómo afecta en nuestra vida? 
• ¿Por qué es importante el autoconocimiento? 
• 7 claves para cuidar tu autoestima 

2.  Llénate de ti.  

En lugar de padecer el temor a quedarnos solos es fundamental llenarnos de nosotros mismos. La soledad debe ser motivo para cuidar de nosotros, procurarnos de bienestar y dedicar amor a nosotros mismos.  

3. Apégate a lo que es importante para ti 

Hay que definir aquello que es importante para nosotros y apegarnos a ello. Dejar de satisfacer los requerimientos de otros, a partir de identificar lo que vale para uno mismo. Descubrir qué posibilidades se tienen de hacer algo que sea coherente con tu escala de valores. Entre más respetes esta parte más pleno o plena te sentirás y así es como ser tu mejor compañía.

4. Trabaja para ti 

No me refiero a empleo remunerado, por supuesto. Para ser tu mejor compañía hay que construir un yo fuerte, asertivo, capaz de gestionar sus emociones adecuadamente. Esto implica reconocer tus fortalezas y debilidades y cambiar tu forma de pensar respecto a ti mismo, a ti misma.   

Igualmente descubre qué cosas te animan cuando estás hundido, busca estrategias de automotivación y mindfulness.  

Procura esforzarte en mejorar cada día. No para alguien más, solo para ti. 

5. Diviértete contigo 

Ahora que estás en casa, no temas al “ridículo”.  He visto que en estos días Tik Tok tiene más suscriptores que nunca, una aplicación en la que puedes hacer videos con imitaciones, bailes, doblaje, ediciones humorísticas. Esta es una forma de reírnos de nosotros mismos, divertirnos las parodias y demás ocurrencias.  

Por supuesto no te digo que descargues la app para ser tu mejor compañía, sino que aprendas a reírte y divertirte contigo mismo. Lánzate a probar cosas nuevas que te reten y al mismo tiempo te satisfagan, es el momento porque tienes tiempo y estás en familia, qué mejor que ser uno mismo entre personas de nuestra confianza.  

Prueba nuevas cosas siempre, te descubrirá de todo lo que eres capaz y que aún no has valorado. 

6. Usa la introspección 

¿Qué es lo más duro que puedes decirte a ti mismo? Eso que parece se esconde detrás del silencio y que te aterra está relacionado con las cosas que tienes por decirte; pero si ya lo sabes, seguramente podrás manejarlo mejor. Sé introspectiva, ve hacia dentro de ti y ten una plática muy seria contigo mismo, arregla los problemas que crees tener. 

La introspección se trata de una inspección interna que te permite conocerte mejor, analizándote a ti misma para interpretar tus propias emociones e ideas. 

Aprende a meditar y observa dentro de ti. Conócete. Indaga en tu interior. Armonízate con el amor y la compasión. 

7. No seas duro contigo 

Aquí alguna vez te he hablado del autoperdón; además de ello debemos comenzar a ser compasivos y bondadosos con nosotros mismos antes de hacerlo con cualquiera otra persona.  Baja tu nivel de auto exigencia y aprende a aceptarte. Quiérete y mímate brindándote espacios para ser tú misma, tú mismo.  

JORGE DOMÍNGUEZ | PSICOTERAPIA | SESIONES ONLINE