Seguramente alguna vez habrás experimentado alguno de estos obstáculos internos comunes que nos imponemos y merman nuestras metas.
Todos tenemos metas que anhelamos cumplir, algunos llegamos a ellas y otras veces experimentamos obstáculos que nos lo impiden. Pero esos obstáculos comunes que nos imponemos suelen derivar de la actitud que asumimos y no sólo de circunstancias ajenas o influencias de otras personas.
Obstáculos internos
Más complicados de vencer, en todo caso, son los obstáculos que habitan en nuestro interior y nos impiden actuar según nuestros propósitos. No nos permiten desarrollarnos como personas y nos alejan del bienestar y la plenitud.
Al respecto cada persona tiene sus propios obstáculos internos como:
- Poca fuerza de voluntad.
- Falta de motivación.
- Poca tolerancia a la frustración.
- Miedo al cambio.
- Miedo al éxito.
- Estilos de pensamiento inadecuados.
1. Fuerza de voluntad
Si tuvieras que evaluar tu fuerza de voluntad ¿qué calificación le pondrías?
A veces creemos que cuando no podemos lograr una meta es debido a la falta de voluntad, y sin ella no hay nada qué hacer. Sin embargo, podemos desarrollar y fortalecer la voluntad.
Ésta es la capacidad de controlar nuestros impulsos y nuestras conductas para dirigir nuestros pasos hacia donde queremos. Tener voluntad es lograr llevar a cabo acciones claras, definidas y concretas, basadas en nuestros deseos y nuestras decisiones.
No podemos carecer de voluntad, en ese caso seríamos incapaces de encausar nuestras vidas y no podríamos sobrevivir.
AQUÍ TE DEJO 10 TIPS DE CÓMO EJERCITAR LA VOLUNTAD
2. Falta de motivación
No cumplir con nuestras metas está ligado a la falta de motivación. Es decir, esa razón que nos mueve a la acción a partir de nuestro deseo; un deseo intenso que nace de aquello que nos importa.
Si la meta no es lo suficientemente significativa, quizá se pierda la motivación y se deje de trabajar para alcanzarla.
Dejamos de tener motivación cuando asumimos las metas de otros como propias, cuando nuestros objetivos son impuestos por presión social, modas, imposiciones familiares. También abandonamos cuando nos ponemos metas inalcanzables o no sabemos cómo lograrlas.
TE DEJO AQUÍ LAS RAZONES POR LAS QUE ES IMPORTANTE SENTIRNOS MOTIVADOS
3. Baja tolerancia a la frustración
Tolerar la frustración nos permite enfrentarnos con éxito a la vida. La baja tolerancia a la frustración nos causa enojo, depresión e incapacidad ante cualquier molestia o problema y provoca la evitación o mala solución de los mismos.
Al respecto, hay que recordarnos que la vida no gira a nuestro alrededor, ni está para satisfacer nuestros gustos y deseos. Por el contrario, debemos enfrentar las adversidades y contrariedades de la vida y hacer algo positivo al respecto.
La frustración es parte de la vida. No podemos evitarla, pero si podemos aprender a manejarla y a superarla.
Siempre podemos aprender a ser más tolerantes ante la frustración. Para ello necesitamos tener paciencia. La paciencia no tiene nada que ver con la necesidad y tiempos de espera, sino con la fortaleza para enfrentar el dolor sin perturbarnos emocionalmente.
4. Miedo al cambio
Al respecto ya te he escrito. El miedo al cambio es más frecuente de lo que deseamos, aun cuando la vida de ello trata, de constantes cambios.
El cambio nos da miedo, porque:
- No sabemos cómo manejar situaciones nuevas o diferentes.
- Puede provocar algún tipo de pérdida, ya sea física, moral, emocional, etc.
- Podemos equivocarnos y ser criticados por los demás y/o por nosotros mismos.
- La falta de control que sentimos. Esto generalmente nos angustia.
Enfrentar el miedo al cambio depende de nuestra autoestima. Cuando nos sentimos seguros y capaces, vemos el cambio como un reto o una motivación positiva. También tiene que ver con lo que aprendimos en la infancia ante ciertas situaciones dolorosas.
POR ELLO TE RECOMIENDO LEER ALGUNAS CLAVES DE CÓMO ENFENTAR EL MIEDO AL CAMBIO
5. Miedo al éxito
El éxito nos da miedo, cuando:
- Consideramos que el éxito demuestra nuestro valor como personas.
- Pensamos que, a mayor éxito, mayores responsabilidades, trabajo y esfuerzo.
- Tenemos la creencia, errónea, de que no nos lo merecemos o de no somos lo suficientemente capaces para mantenerlo.
- Consideramos que el éxito va a provocar la envidia y el malestar de la gente que nos rodea, alterando o deteriorando nuestras relaciones.
- Pensamos que, si logramos nuestra meta, vamos a perder la motivación o ya no vamos a tener algo porque luchar.
Estos miedos nos paralizan y evitan que hagamos lo necesario para cumplir las metas.
6. Estilos de pensamiento inadecuados
El estilo de pensamiento es la forma de pensar, que desarrollamos a partir de nuestra relación con el mundo y con nosotros mismos. Estos estilos pueden ser adecuados o inadecuados.
Un estilo de pensamiento basado en lo negativo es inadecuado porque:
- Nos hace sufrir.
- Nos impide ver las cosas tal como son.
- Nos dificulta encontrar la solución a nuestros problemas.
Estos estilos de pensamiento son formas equivocadas de percibir, analizar y relacionarnos con la realidad. Nos perjudican
Al tener una perspectiva negativa de la realidad nos aterra y nos paraliza. Evita que nos aventuremos a hacer cosas que nos lleve a cumplir metas deseadas.
Para evitarlo hay que analizar los pensamientos más frecuentes y modificarlos poco a poco. Lo mismos si estos pensamientos son pesimistas.
Si te es difícil detectar si este tipo de pensamiento es parte de tu forma de ser, revisa tus emociones. Las emociones están causadas o mantenidas por nuestros pensamientos. Posiblemente tu manera de pensar está influyendo en tus sentimientos.
JORGE DOMÍNGUEZ | PSICOTERAPIA