Podríamos aprender algunas lecciones de Sisu, la filosofía resiliente de los finlandeses. Y es que si se trata de lograr el bienestar de manera global: mente, cuerpo y espíritu, y con esto enfrentar la adversidad, podemos aprender de culturas diversas y la manera en que afrontan la vida.
En el caso de Finlandia, un pueblo que hoy es considerado de los más desarrollados del planeta, tiene su propia manera de afrontar la adversidad a través de lo que hoy conocemos como Sisu, que hace referencia a la fuerza interior del ser humano que se mantiene latente y aflora en los momentos difíciles.
Dominar el miedo, controlar el estrés, ser honesto y perseverante, son algunos de sus principios elementales.
LECCIONES DEL SISU O SUS PRINCIPIOS BÁSICOS
ACEPTACIÓN: Enfrentar la adversidad va de la mano con la aceptación, no como una fórmula de resignación sino de arrojo frente a las circunstancias que debemos afrontar. Aceptar la experiencia adversa nos permitirá manejarla de una forma asertiva, en vez de evadirnos frente a nuestras emociones.
ENFRENTA EL MIEDO: Librar la adversidad implicará valor, aprender a gestionar el miedo.
AUTOCONFIANZA: Cuando somos capaces de afrontar nuestros miedos y sabemos manejarnos frente a ellos sin negarlos, vamos teniendo la oportunidad de conocernos mejor, entender de lo que somos capaces y cimentar nuestra autoconfianza que nos mantendrá firmes ante la adversidad.
PERSEVERANCIA: En una cultura que nos apremia cada vez más, que nos impulsa a la impaciencia y a que todo sea inmediato e incluso furtivo; la perseverancia se vuelve un factor importante para afrontar la adversidad. Ser perseverante nos permite practicar la paciencia, la tolerancia y va forjando, poco a poco, soluciones más sólidas frente a la situación.
La perseverancia nos ayuda a lidiar con la frustración, a encontrar múltiples opciones y con ello ser creativos. Nos impide claudicar o renunciar a la meta.
GESTIONA EL ESTRÉS: Sin duda alguna los problemas de toda índole y la adversidad generan en nosotros algún nivel de estrés, el cual en algún momento podrán distraernos del objetivo. Las emociones negativas nos pueden vencer y obstaculizar el camino hacia el triunfo.
SÉ HONESTO, MANTENTE INTEGRO: Nada como ser nosotros mismos será lo que nos permite salir adelante frente a la dificultad. Respetarnos a nosotros mismos y a los demás es un principio elemental de valía que puede ser la mejor herramienta para ello. Nuestras cualidades humanas son los recursos esenciales con los que podemos enfrentarnos a la vida, en las buenas y en las malas.
RESUELVE PROBLEMAS: Si aprendes a resolver pequeños problemas podrás afrontar los grandes problemas. Es decir, debemos aprender a enfrentar cada problema sin evadirlo, lo que nos dará destrezas para afrontar la vida cotidiana y, a la larga, también los grandes problemas. Y es que los problemas son parte de la vida a las que no debemos darles la vuelta.
Aprender a resolver desde los pequeños problemas nos entrena para ser capaces de ampliar la perspectiva, visualizar desde múltiples aristas y así capacitarnos para el futuro.
TRASCIENDE EL MOMENTO: Hablando del futuro, al afrontar la vida el Sisu nos pide que veamos más allá del instante, que seamos capaces de visualizar el futuro, tanto para afrontarlo en su momento como para adquirir hoy la experiencia que nos sea útil para entonces.
TEN IDEALES Y METAS: Tener ideales y metas siempre nos impulsará hacia adelante siguiendo una doctrina propia enfocada en ideales que adquirimos para conducir la vida. Estas metas deben ser realistas, referentes a nuestros valores y lo que deseamos.
RESILIENCIA: Al final estas actitudes nos preparan para tener agallas ante las situaciones críticas; no sólo para sobrevivir a la adversidad sino también recuperarnos e incluso salir avante mucho más fuertes y más sabios.