¡Comparte! Las bondades de compartir
¡Comparte! Es una frase que, actualmente, vemos mucho en las redes sociales, especialmente en las páginas de marcas y medios que buscan hacer sus contenidos virales (que mucha gente los vea) pues de ello dependen sus ventas, su popularidad, sus patrocinios, etc. Aunque hay algo más que distribuir contenidos en un mundo virtual, volvamos la mirada para compartir de forma real la vida con los demás y analicemos cómo nos enriquece hacerlo.
COMPARTIR ES UN ACTO VIRTUAL QUE MERMA LA REALIDAD
Hay quienes consideran que la vida se hizo para compartir nuestras experiencias y sentimientos, pues somos seres sociales a quienes podría matar el aislamiento; aunque hoy parecemos más metidos en compartir en las redes sociales que compartir vivencias con los demás.
¿Cuántas imágenes no habremos visto de familias comiendo juntas, pero donde cada miembro está viendo lo suyo en una pantalla de teléfono o tableta? ¿La gente hoy comparte contenidos, pero no comparte el tiempo real con sus seres queridos?
COMPARTIR LA VIDA
Como vemos, hablar de Compartir puede abordar múltiples factores pues podemos compartir un trozo de chocolate, una silla, un día de campo o una salida al cine, una emoción; y así como —lo dije antes— un meme en Facebook. ¿De qué estoy hablando entonces cuando pienso en compartir?
Pensemos en el beneficio de compartir la vida con las personas que queremos.
Compartir es desposeerte de algo, olvidar tu individualidad y egoísmo para hacer partícipe a otro(s) de lo que en su momento fue tuyo o consideras tuyo: promueve nuestra generosidad. No sólo es realizar una misma actividad con otro, es pensar en otros y tener la disposición de disfrutar, respetar al otro y ser empático.
Compartir es una forma de madurar y renunciar a nuestros propios intereses para considerar, también, las necesidades del otro. Asimismo, en el acto de compartir es necesario que haya un placer de dar y corresponder, que el propio intercambio nos sea razón de gozo por estar con el otro. Así, compartir también se trata de acompañar, ceder tu espacio y tu tiempo individual para ir al encuentro de otro(s). Desposeerte de ti y ser un nosotros.
Y cuando compartimos, y nos hacemos nosotros, equilibramos relaciones eliminando las diferencias porque tanto yo como con quien comparto estamos disfrutando o experimentando lo mismo de igual manera, o de lo contrario el compartir resultará en un fracaso.
Esto será entonces un acto solidario y amoroso que comprende una acción que nos vincula con otros bajo las mismas condiciones. Compartir es, en gran medida, una muestra de afecto y ahí nuestra gran necesidad de convidar con otros nuestra existencia, pues hacerlo acaba con nuestra sensación de soledad.
Además, compartir:
- Enriquece la comunicación entre quienes comparten
- Incrementa nuestra autoestima al sabernos acompañados cuando se comparte
- Reduce el estrés, el hacer partícipes a otros de nuestras preocupaciones aligera la angustia
- Aumenta el optimismo, porque estar con otros —con quienes compartimos— nos da ilusión y esperanza
- Nos fortalece y da seguridad
Finalmente, compartir es un gran ejercicio de crecimiento y mejora personal, pues pone a prueba nuestras habilidades sociales, nuestros sentimientos, autoestima y valores.
¿POR QUÉ COMPARTIMOS EN REDES SOCIALES?
Por supuesto no podemos evitar los estudios que se han realizado respecto a los motivos por los que compartimos en las redes sociales, y ésta son*:
- Compartir esta idea me hace sentir generoso, desinteresado
- Me siento inteligente, “listillo”, hago gala de “estar bien informado”
- La idea me interesa y quiero tomar parte activa en que triunfe, en que se extienda
- No tengo elección, cuando uso tu producto, extiendo la idea quiera o no (la manzanita luminosa de Apple, la firma de los correos de Yahoo! o Hotmail…)
- Obtengo un beneficio económico directo (programas de afiliación, etc.)
- Es divertido, es gracioso, recurre al humor
- Quiero sentirme acompañado, compartir provoca una respuesta y evidencia el hecho de que no estoy solo
- Estoy indignado y quiero que otros se sumen a mi indignación
- Nos beneficiamos económicamente tanto yo como aquellos con quienes lo comparto (modelo Groupon y afines)
- Alguien que conozco o con quien me siento implicado me lo pide directamente
- Puedo usarlo para unir a diferentes personas y construir comunidad
- Economías de escala, tu servicio – que yo ya utilizo – funcionará mejor para mí si mucha gente lo usa
- Tu idea me permite expresar algo que yo tengo dificultad para expresar o explicar directamente
- Me permite ayudar a alguien que me importa o interesa
- Es mi trabajo (social media managers, etc.)
- Me gusta lo que haces y es mi manera de pagarte por ello
*FUENTE: Enrique Dans, La psicología de compartir, https://www.enriquedans.com/2010/11/la-psicologia-del-compartir.html