Estas 5 excusas que damos para no ir a psicoterapia están basadas en la ignorancia y el miedo a afrontar los problemas.
“Ni que estuviera loco”. Es la excusa que quizá se encuentra en top de las razones por las que las personas se rehúsan a acudir a psicoterapia. Pero no es la única. Los motivos son diversos desde falta de recursos económicos hasta prejuicios y miedos a revivir ciertas heridas. Hoy te contaré qué dice la gente para no ir a terapia.
Aunque hoy en día es cada vez más frecuente que las persones consideren normal e incluso saludable ir a psicoterapia, aún hay población que teme el proceso y prefiere escudarse en argumentos como:
La psicoterapia es para locos
Aunque existe un estigma al respecto de la salud mental, ya hemos dejado los años en que las terapias se aplicaban sólo a casos extremos de enfermedad mental o trastornos emocionales severos. Hoy debemos reconocer que asistir a psicoterapia es, como ir al spa o al gimnasio, concedernos un espacio íntimo de bienestar.
A terapia no va quien tiene problemas, porque éstos los tenemos todos. A terapia va quien quiere resolverlos, por mínimos que parezcan.
En terapia se es escuchado sin ser juzgado, se afrontan asuntos pendientes, se toma consciencia se asume la responsabilidad emocional, se mejora el bienestar, se encuentran respuestas. Y seguramente todos hemos tenido preguntas, así como deseamos sentirnos mejor en todo momento.
Yo puedo cambiar sin ayuda
Esta es otro gran motivo por el que dejamos de ir a terapia. Una especie de soberbia que nos hace creer que con sólo darle vueltas a las cosas podremos solucionar nuestros problemas, preocupaciones o inestabilidad emocional.
Pero a veces, nuestros patrones tóxicos están tan interiorizados en lo más profundo de nuestra mente que, aunque seamos conscientes de que no son sanos nos siguen dañando y controlando. No tiene nada de malo reconocer que requerimos ayuda de otros para sanar nuestras heridas, para cambiar nuestros patrones, para sentirnos mejor.
. Sin embargo, a veces, nuestros patrones tóxicos están tan arraigados en la mente más profunda que, aunque seamos conscientes de que no son sanos para nosotros, nos siguen perjudicando y dominando. En estos casos, no tiene nada de malo reconocer que necesitamos ayuda externa para poder cambiar.
Me da miedo escarbar en el pasado
La psicoterapia busca solucionar problemas actuales a través del diálogo y de la guía de un profesional que te ayudará a encontrar los motivos de tu infelicidad o incomodidad actual, que está preparado para guiarte y contenerte en todo momento.
Profundizar en el origen de tus heridas es, aunque doloroso, la forma en que podrás desterrar de tu vida el sufrimiento. Y es que el paso nos afecta, y lo hará hasta que no lo resolvamos. No existe peor dolor que seguir sufriendo de forma descontrolada y, además, desconocer de dónde procede este malestar.
El psicoterapeuta crea un espacio de confianza y está capacitado para darte herramientas que te permitan salir adelante. Además, el proceso es paulatino y en el camino la persona va empoderándose y ganando confianza para luchar contra sus “demonios” hasta poder lanzarlos fuera de su vida.
No creo en la psicología
Este es un argumento falto de sustento. La psicología es una disciplina de largas raíces, que ha procurado el profundo conocimiento del alma humana y que tiene diversas escuelas para brindar las más variadas respuestas según las necesidades de cada persona.
Se estudia en una universidad, se obtienen certificaciones y se practica bajo la vigilancia de autoridades sanitarias en cada país.
El psicoterapeuta profesional tiene una especialidad en el comportamiento humano. Gracias a su formación, experiencia y habilidades como psicoterapeuta está capacitado para ayudarte a sentir mejor.
La psicoterapia es cara
De la misma forma en la que pagas a un médico para que sane tu cuerpo, a un odontólogo para que mantenga tu salud bucal, pagas del mismo modo a quien va a cuidar de tu salud mental y emocional. Esa debería ser la valoración que deberíamos hacer frente al costo/beneficio de la psicoterapia.
Y aunque existe quien realmente no pueda pagarlo, existen muchas alternativas para lograr apoyo de un profesional. Las autoridades gubernamentales en casi todos los países del mundo brindan apoyo emocional gratuito, existen consultas vía telefónica en caso de crisis sin cosos. Incluso hoy en día vemos con mayor frecuencia la opción de tener sesiones vía web que pueden resultar más económicas ya que el terapeuta no requiere pagar la renta de un consultorio.
Como éstas, existen muchas otras excusas por las que la gente no tiene una atención psicológica adecuada. Ello se debe, también a la ignorancia y mitos que han cundido al respecto. Yo te invito, en cambio, que te informes, que tomes una sesión y tengas la experiencia antes de rechazarla por completo.
JORGE DOMÍNGUEZ | PSICOTERAPIA