Hoy te dejo estas 18 preguntas que debes hacerte para cerrar el año y concluir sanamente este ciclo vital.
Ya estamos en esa época de reflexión en que meditamos sobre lo que hicimos en el año, lo que experimentamos, la gente que conocimos, quienes ya no están, incluso pensamos también en aquellas cosas que dejamos de hacer. Miramos con nostalgia nuestro pasado y vemos, quizá con incertidumbre, el futuro.
Pero cómo recibiremos el futuro si no hemos concluido con el pasado. Cada celebración de año nuevo es un buen momento para cerrar ciclos, finiquitar las cuentas y abrir los brazos a un nuevo ciclo por venir. Por ello hoy te hablaré sobre cómo cerrar el año.
Cerrar ciclos, no lo olvides, es importante para avanzar e integrar aprendizajes en nuestra vida. Es un trabajo en el que hay que aceptar que las cosas no son como antes, pero que lo aprendido se puede utilizar para dirigirnos de una manera diferente.
Un ritual es buena idea
Realizar un ritual de fin de año puede ayudarnos a dejar atrás lo que ya no necesitamos y entrar de forma más optimista en un nuevo año lleno de posibilidades. Este ritual de fin de año también puede resultar útil para focalizar nuestras metas, siempre y cuando éstas sean realistas, deseadas y dependan, al menos en parte, de nuestra voluntad y esfuerzo.
Existen muchos rituales, como escribir listas de cosas que se quieren dejar atrás para luego echarlas al fuego y soltar; encender velas, colocar miel con canela para la prosperidad, etc. Hay rituales para encontrar el amor, el dinero o para viajar más. Sí, un ritual es una buena idea, pero te voy a proponer otra forma más personal y consciente de abrirte al futuro desde el interior.
18 preguntas que debes hacerte para cerrar el año
Cerrar el año y abrirte al futuro debe ser un acto consciente basado en la reflexión, por ello te doy algunas claves para hacerlo de manera más ordenada. Te recomiendo, además, que lo hagas por escritor para que te concentres más en ello y pongas más atención.
Basta tu reflexión en hacerte algunas preguntas como éstas:
- ¿Estoy atrapada en mi pasado, viendo hacia atrás?
- ¿Cuáles han sido mis dependencias?
- ¿Qué creencias limitantes más me he repetido?
- ¿Me dispongo, con toda mi energía, a ir hacia adelante, atenta a cada paso que doy?
- ¿Qué capítulo de mi vida quiero cerrar?
- ¿Qué nueva historia quiero escribir a partir de hoy?
- ¿Estoy dispuesta a abrirme a nuevas oportunidades y experiencias?
- ¿Qué tan dispuesta a estoy a avanzar aún sin saber lo que pueda pasar?
- ¿Asumo mi esencia y mi verdadero ser?
- ¿Estoy dispuesta a ser libre?
- ¿Qué pasaría si me abriera a recibir?
- ¿Qué quiero recibir de la vida?
- ¿Cuáles cosas me he negado a ver?
- ¿De qué personas me quiero rodear de ahora en adelante?
- ¿Qué nuevas semillas voy a sembrar a mi alrededor?
- De lo que he sembrado, ¿qué puedo cosechar?
- ¿Qué quiero dejar ir?
- ¿Cómo quiero iniciar un nuevo año?
¿Qué debes hacer para cerrar el año?
Ya conoces tus respuestas, pero también puedes hacer algunas de estas cosas:
- Depurar sentimientos y emociones acumulados.
- Dejar ir con perdón y agradecimiento.
- Limpiar la mente de pensamientos rumiantes y de creencias limitantes.
- Sanar el enojo y resentimiento.
- Definir hacia dónde se quiere caminar.
- Reconectar con el equilibrio y esencia.
- Identificar las herencias emocionales y sanarlas.
- Agradecer lo recibido y tomado de la vida.
- Aclarar la visión respecto a lo que se desea dar.
- Reconocer hacia dónde se quiere seguir creciendo.
- Abrirse a nuevas experiencias.
- Terminar pendientes, cerrar proyectos
- Anotar el aprendizaje de las experiencias obtenidas.
- Revisar los miedos superados y los que aún no.
- Comprometerse con el aquí y el ahora.
- Decir más “te quiero”.
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JORGE DOMÍNGUEZ | PSICOTERAPIA