10 claves para tener paz mental que mejorarán tu calidad de vida y bienestar emocional.
“Hay mucho ruido en mi cabeza, las exigencias cotidianas me abruman, con frecuencia me siento en tensión y a veces creo que voy a claudicar en los empeños diarios”.
Julieta se presentó a la sesión con quejas sobre lo angustiada que se sentía y un constante sentimiento de exigencia que se autoimponía, pues le interesaba cumplir con expectativas de cosas que consideraba eran su deber.
Ella pasaba el día dándole vueltas a las cosas, sobre pensando la manera de perfeccionar esto o aquello, intentando tener el control de cada movimiento. Por supuesto su mente no tenía descanso ni paz.
Tal vez tú te hayas sentido como Julieta en algún momento, un sentimiento de estar rebasado por los acontecimientos de la vida diaria que consterna tu mente. Por ello, hoy te dejoalgunas claves de cómo tener paz mental.
¿Qué es la paz mental?
La paz mental es un equilibrio al que se consigue volver después de las experiencias negativas o a pesar de ellas. Ésta es importante, permite mantener la salud mental y disfrutar de una mejor calidad de vida; además, contribuye a una buena interacción con otros, al mismo tiempo que permite una aceptación de uno mismo, con quien requerimos estar en armonía.
10 claves para tener paz mental
1. Simplifica tu vida. Comienza a establecer prioridades en tu vida y a soltar todo aquello que no te hace sentir bien.
2. Lleva un equipaje ligero. Decide todo aquello que vale la pena conservar, aquello que en realidad te trae satisfacción y que no te lo has adjudicado porque crees que es lo que los demás esperan de ti.
3. Suelta el control. La vida no puede controlarse. Es imprecisa e impredecible, su gran cualidad es la sorpresa. Deja de temer a la incertidumbre sobre el futuro y asume el aquí y el ahora como tu mejor momento. Haz con lo que ello lo mejor que puedas.
4. Confía más en ti. Generalmente uno pierde la paz mental porque vive en el exterior y cuida poco su interior. Y miramos hacia afuera porque hemos dejado de confiar en nosotros y buscamos la guía y aprobación en los otros. Si nos volteamos a ver a nosotros mismos, seguramente encontraremos la paz mental que necesitamos.
Adquiere tu paz mental
5. Cuida tus pensamientos. Esto es algo que digo con frecuencia, porque en realidad esta mente cargada de cosas es una mente que está pensando de manera descontrolada y en exceso. Tú puedes elegir dónde poner tu atención y qué pensamientos quieres tener en tu cabeza.
Aquellos pensamientos que no te sirven, que te generan inquietud o ansiedad, incluso los que te atormentan son sólo eso: pensamientos. Haz una criba de tus pensamientos.
6. Permanece consciente. No quites la atención de ti mismo, escucha a tu cuerpo, deja actuar a tus emociones (no las reprimas), expresa tus ideas y deseos. Permanece más consciente de ti y lo que necesitas.
7. Un día a la vez. Es una fórmula que les sirve a los alcohólicos, sobriedad un día a la vez. ¿Por qué no habría de servirnos a nosotros para llevar la vida sin tanta carga? Hay que llevar el día a día resolviendo cada momento, planeando a futuro con flexibilidad y sin temor al error.
Primero tu paz mental
8. Recuerda que todo pasa. Hay un proverbio chino que dice “si hoy nos sucede mal, no será siempre así”. La vida se trata de eso, de gozar los momentos fáciles y ser resilientes ante la adversidad. Todo en equilibrio. Si estás pasando un momento difícil, busca la ayuda que necesites, date tu tiempo, deja que pase.
9. Sé más flexible frente a las expectativas. La vida puede presentar retos que no contemplabas, puede retrasar un poco las cosas, a veces toca afrontar situaciones que nos desvían momentáneamente de lo planeado.
10. Cierra ciclos. Muchas veces vamos por la vida más preocupados por recordar y lamentarnos por el pasado que de vivir lo que se presenta en el ahora. La paz mental cambia esto. Te permite dejar ir lo que está de más y aprender a gozar lo que tienes hoy. Preocuparse en exceso no es positivo ni sano, así que no lo hagas.
Encontrar la paz mental depende del desarrollo de cualidades, actitudes y una disposición ideal para afrontar el día a día. En algunos casos, lo mejor es apoyarse en un profesional de la salud mental, un psicólogo que pueda orientar y establecer estrategias ideales según el caso.
JORGE DOMÍNGUEZ | PSICOTERAPIA